domingo, 19 de octubre de 2014

Hasta algún día... te amo

Como aceptar que otra vez me decepcionaste, que otra vez me dejaste sola. Cuantas veces me prometiste que iba de verdad? No se que me pasa, no lloro, no estoy bajón, es tanta impotencia la que tengo que ni el llanto me sale. Después de esto me dejas con tantas preguntas, que quizá nunca me las respondas, o quizá si pero no sean verdad. Como olvidarme de esos ‘buen día mi amor’ de todos los días? O esos ‘te amo princesa’ de todas las noches? Sos algo que deje que entrara a mi vida y se quedara, y si, la culpa de que me hagas mal es mía, pero dejé que me lastimarás, que me usarás cada vez que vos querías. Ojala ese que conocí hace un tiempo vuelva, ese pibe que sus sentimientos eran de verdad, que todo lo que sentía lo decía, que vuelva ese pibe que me enamoró. 
Fue tan lindo mientras duro, fui tan feliz en dias, pero de todos esos dias, cuantas cosas por las que era feliz eran verdad? Pocas. Te quise con todas mis fuerzas y te juro que no me arrepiento, no me arrepiento de haber dado todo de mi para que esto funcione, pero a veces dicen que ganas perdiendo. Capaz es suerte que sigamos separados, quien sabe? Tan fácil es lastimarme? Creo que de estos dos años me llevo las cosas lindas que pasaron, me llevo esos momentos en que uno estaba para el otro, con un abrazo, una simple llamada de los dos llorando descargando lo que nos pasaba, cambiabas mis días. Hacías que el mal humor no exista, que mi sonrisa dure 24 hs, muchas veces fuiste el único que me daba motivos para sonreír cuando todos eran para llorar. No quería llegar al tema, pero ese testamento, el que me daba esperanzas a estar juntos, a ser dos en uno, toda esa esperanza la rompiste en un segundo. 
Perdi absolutamente todas las esperanzas, todas. No me queda ni esa minima que tenia. Espero que ella te haga feliz, sea quien sea, que no te lastime por favor. La odio por tenerte, por poder darte besos cuando quiera, la odio por hacerte feliz. Necesito que me calmes, que me des esos abrazos, esos besos con tanta paz, que me grites, que me pelees, que me hagas cosas para que me enoje y arregles todo con besos, que, obviamente, servia. Espero que te des cuenta que me perdiste, que en algún momento ya no vas a ser el que este en mi cabeza, y que no aprovechaste ninguna oportunidad.
 Ahora si, hasta algún día... te amo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario